Familias de consumidores de drogas: respuestas sanitarias y sociales
Introducción
Esta miniguía forma parte de un conjunto más amplio que, combinado, constituye las Respuestas sanitarias y sociales a los problemas relacionados con las drogas: una guía europea. Se ofrece una visión global de los aspectos más importantes a tener en cuenta a la hora de planificar o proporcionar respuestas sanitarias y sociales para las familias de consumidores de drogas y examina las respuestas disponibles y su eficacia. También tiene en cuenta las implicaciones para las prácticas y las políticas.
Última modificación: 8 de diciembre de 2022.

Contenido:
Resumen
Cuestiones clave
Los niños y otros miembros de la familia de una persona con consumo problemático de drogas pueden padecer una serie de perjuicios sanitarios, sociales y económicos. Esta miniguía se centra tanto en las familias de adultos que tienen problemas relacionados con las drogas como en las familias de niños y jóvenes que necesitan apoyo a consecuencia de comportamientos relacionados con las drogas. Los familiares pueden contribuir significativamente apoyando al pariente que consume drogas y animándole a seguir un tratamiento. Sin embargo, los familiares pueden padecer una serie de problemas relacionados con el consumo de drogas de su pariente, como preocupación y angustia psicológica, tensiones en las relaciones familiares y cargas financieras.
Los niños cuyos progenitores o cuidadores principales tienen un consumo problemático de drogas pueden ser especialmente vulnerables, pero muchos niños que conviven con un progenitor que consume drogas no sufren ningún daño. Por lo tanto, es importante reforzar y apoyar la resiliencia de los niños, además de identificar y abordar sus problemas específicos.
Los familiares también pueden contribuir de forma positiva apoyando al pariente que consume drogas y animándole a seguir un tratamiento.
Pruebas y respuestas
- Servicios de apoyo a la familia específicos que ofrezcan ayuda y apoyo a los familiares por derecho propio.
- Prestar apoyo a los familiares que ejercen de progenitores de los hijos de un familiar consumidor de drogas.
- Facilitación de una atención sanitaria adecuada por parte de los médicos en la atención primaria, incluidas intervenciones basadas en pruebas, como el programa de cinco pasos.
- Impartir formación a profesores y otro personal escolar sobre planteamientos basados en el trauma para tratar con niños vulnerables, garantizando un entorno escolar de apoyo.
- Llevar a cabo una evaluación adecuada de las relaciones familiares en el momento de iniciar el tratamiento de la drogodependencia y apoyar a los miembros de la familia para que contribuyan al éxito de los resultados.
- Intervenciones más intensivas y especializadas, como tratamiento intensivo basado en la familia, terapia conductual de parejas, terapia familiar multidimensional y enfoques basados en redes sociales.
- Desarrollar respuestas para prevenir los daños, promover la resiliencia y prestar apoyo a los niños afectados por el consumo de drogas por parte de los progenitores en las diferentes fases de su desarrollo.
- Apoyo en el duelo.
Perspectiva europea
La mayor parte de la información sobre la disponibilidad de intervenciones relacionadas con las drogas para las familias en Europa se refiere específicamente a las políticas e intervenciones que incluyen o se dirigen a los niños de las personas que consumen drogas. La importancia de apoyar a los niños afectados por el consumo de sustancias de los progenitores se reconoce en los documentos de las políticas de la Unión Europea (UE) y en las estrategias sobre drogas de la mayoría de los países de la UE.
Se adoptan diferentes metodologías a fin de garantizar que se dispone de intervenciones adecuadas para apoyar y satisfacer las necesidades de los niños en los diferentes grupos de edad y en diversas circunstancias. Entre los recursos existentes figuran la Plataforma Europea para la Inversión en la Infancia (EPIC) y el registro de prevención Xchange del EMCDDA.
Existe poca información sobre la disponibilidad de programas de apoyo a familiares adultos de personas con problemas de drogas en Europa. En algunos países europeos existen organizaciones nacionales de apoyo y defensa de la familia dirigidas por homólogos, en que el apoyo al duelo suele ser un componente importante de su trabajo. Estas organizaciones también pueden participar en campañas o promover los programas de distribución de naloxona.
Cuestiones clave relacionadas con las familias de los consumidores de drogas
Los niños y otros miembros de la familia de una persona con consumo problemático de drogas pueden padecer una serie de perjuicios sanitarios, sociales y económicos. Esta miniguía se centra tanto en las familias de adultos que tienen problemas relacionados con las drogas como en las familias de niños y jóvenes que necesitan apoyo a consecuencia de comportamientos relacionados con las drogas. Los familiares pueden contribuir significativamente apoyando al pariente que consume drogas y animándole a seguir un tratamiento. Sin embargo, los propios miembros de la familia pueden padecer una serie de problemas, entre los que figuran:
- preocupación y el malestar psíquico que pueden causar mala salud física y mental;
- tensiones en las relaciones familiares, con una posible pérdida de la vida social y un mayor sentimiento de aislamiento debido al estigma asociado a tener un familiar que consume drogas;
- la carga financiera de mantener directa o indirectamente al familiar que consume drogas, que puede incluir el cuidado de sus hijos;
- el posible impacto en el trabajo debido al estrés o las responsabilidades adicionales del cuidado;
- daños causados por la violencia en la pareja o malos tratos a menores;
- la exposición a amenazas y violencia asociadas a las deudas por drogas y a la participación del familiar consumidor de drogas en el mercado ilegal.
El impacto específico que puede tener el consumo de drogas de una persona en los miembros de su familia variará de una persona a otra y dependerá de sus propias circunstancias y de su relación con la persona que consume drogas. Además, aunque muchas personas que consumen drogas gestionan bien sus responsabilidades parentales, algunas necesitan apoyo, y en el caso de algunas responsabilidades relativas al cuidado de los hijos pueden suponer un gran reto, lo cual puede repercutir en la familia. Por ejemplo, los progenitores de persona con consumo problemático de drogas pueden verse obligados a criar a sus nietos de forma temporal o permanente. Los hermanos pueden verse afectados por el comportamiento caótico de los consumidores de drogas. También pueden sentirse desatendidos por sus padres, cuya atención se centra en la hermana o el hermano que consume drogas. Puede que las parejas de las personas con problemas de drogas deban asumir toda la responsabilidad respecto a todos los aspectos de la vida familiar y, además, deban preocuparse por su pareja que consume drogas. También pueden sentirse culpables y ansiedad por la repercusión en sus hijos.
En ocasiones, las familias pueden sentir la necesidad de desprenderse del consumidor de drogas, que también puede suponer un problema y ocasionar repercusiones psicológicas importantes. Independientemente de si las familias se mantienen o no unidas, el daño que sufren las relaciones puede ser profundo.
Los niños cuyos progenitores o cuidadores principales tienen un consumo problemático de drogas pueden ser especialmente vulnerables, sobre todo si tienen un estilo de vida caótico e impredecible. La experiencia de los niños de personas que consumen drogas se ha denominado «daño oculto», un término que se refiere a dos características clave de la experiencia: los niños pueden padecer daños de varias formas como consecuencia de una crianza inadecuada; y a menudo no son conocidos ni respaldados por los servicios pertinentes.
Los daños que pueden sufrir los niños pueden variar a diferentes edades y en función de las sustancias que consumen sus progenitores y de si, o en qué medida, el consumo de drogas afecta a sus capacidades parentales. Pueden clasificarse en cuatro ámbitos principales: salud y bienestar; educación y capacidad cognitiva; relaciones e identidad personal; y desarrollo emocional y conductual. En el cuadro 1 se destacan algunos de los daños o dificultades que pueden experimentarse en las diferentes etapas de la infancia.
Cuadro 1: Resumen de los ámbitos de posible impacto en los niños a lo largo de sus etapas de desarrollo, en los que se ha observado una asociación con el consumo de sustancias por parte de los progenitores
Edad en años |
Salud y bienestar |
Educación y capacidad cognitiva |
Relaciones e identidad personal |
Desarrollo emocional y conductual |
---|---|---|---|---|
0 a 4 |
Síndrome de abstinencia neonatal Higiene y dieta deficientes Pérdida de inmunizaciones y de controles médicos y dentales Riesgos para la seguridad debidos a un control inadecuado Violencia física |
Falta de estimulación debido a la preocupación de los progenitores por las drogas y sus propios problemas Participación irregular o ausencia de asistencia en la educación preescolar |
Separación de uno o ambos progenitores biológicos Problemas de apego a los progenitores o al cuidador Puede esperarse que asuma una responsabilidad excesiva |
Inseguridad emocional debido al comportamiento parental inestable y a su ausencia Hiperactividad, falta de atención, impulsividad, agresividad, depresión y ansiedad: todas ellas más frecuentes Miedo continuo a la separación Respuestas aprendidas inapropiadas por haber presenciado violencia, hurtos y comportamientos sexuales de adultos |
5 a 14 |
Ausencia de reconocimientos médicos escolares Revisiones dentales no realizadas Escaso apoyo en la pubertad Más probabilidades de fumar, beber y consumir drogas a edades tempranas |
Escasa asistencia escolar, preparación y concentración debido a una situación familiar inestable, especialmente si se cuida de los hermanos Mayor riesgo de exclusión escolar |
Amistades limitadas Puede asumir una responsabilidad excesiva por los progenitores o hermanos Mala imagen de uno mismo y baja autoestima |
Más actos antisociales por parte de los niños; depresión, ansiedad y retraimiento entre las niñas Trastornos emocionales y trastornos de conducta; por ejemplo, el acoso y el abuso sexual son más frecuentes |
15+ |
Mayor riesgo de consumo problemático de sustancias, embarazo y enfermedades de transmisión sexual |
La falta de estudios puede afectar a la calidad de vida a largo plazo |
La falta de modelos adecuados puede afectar a las relaciones y a la identidad personal |
Mayor riesgo de autoculpa o culpa, mayor riesgo de suicidio Mayor riesgo de delinquir y criminalidad |
Los riesgos pueden aumentar cuando:
- el menor está expuesto a múltiples problemas;
- el niño vive con dos progenitores que tienen un consumo problemático de drogas;
- la gravedad de los problemas es mayor;
- se producen trastornos importantes en la familia.
Sin embargo, existen pruebas de que los niños pueden crecer en muchas circunstancias variadas y difíciles sin desarrollar problemas significativos y gozar de buenos resultados. Reforzar y apoyar la resiliencia de los niños es importante en este contexto, junto con la identificación y la resolución de sus problemas.
Además de prestar apoyo en la vida cotidiana, las familias pueden ser una fuente importante de motivación y ayuda económica para que un familiar cambie su conducta de consumo de drogas y, cuando sea necesario, inicie y continúe el tratamiento de drogodependencia. Las investigaciones demuestran que puede ser beneficioso involucrar a las familias en el tratamiento.
Pruebas y respuestas a los problemas relacionados con las drogas en las familias
Las respuestas a los problemas relacionados con las drogas, en particular las que se centran en el tratamiento, suelen centrar la atención en la persona con un problema de consumo de sustancias. Cuando los miembros adultos de la familia participan de algún modo, suele estar relacionado con la idea de que la familia puede desempeñar un papel importante en el apoyo a la participación en el tratamiento de la drogodependencia y la reducción del consumo. La terapia familiar multidimensional, por ejemplo, es un tratamiento integral basado en la familia para adolescentes con problemas de consumo de drogas y de conducta. Se ha comprobado que es más eficaz para mantener el tratamiento y reducir el consumo que la psicoterapia individual.
En el momento de iniciar el tratamiento de la drogodependencia, puede ser fundamental realizar una evaluación de las relaciones familiares, que incluya el reconocimiento de la contribución de los miembros de la familia en el apoyo a la persona con un problema de consumo de drogas. Por lo general, esto también podría incluir la prestación de información y de formación sobre el uso indebido de drogas, la identificación de causas de estrés, la gestión de las recaídas y el fomento de las capacidades para hacer frente a los obstáculos. Los servicios de tratamiento deben respetar la confidencialidad del paciente, pero se pueden desarrollar protocolos que permitan el apoyo familiar, si procede.
Más recientemente, ha aumentado la conciencia de que los familiares adultos de los consumidores de drogas pueden beneficiarse de los servicios y las intervenciones por derecho propio. Por ejemplo, los grupos de apoyo entre iguales y los servicios de apoyo especializados pueden ser valiosos para reducir el aislamiento social. Otros servicios incluyen la prestación de apoyo en caso de duelo y apoyo para los familiares que ejercen de cuidadores, como abuelos que cuidan a los hijos de sus descendientes que consumen drogas.
Los médicos que trabajan en la atención primaria deben reconocer y abordar las necesidades sanitarias de los individuos afectados por un familiar que consume drogas. Una serie de programas se centran en abordar las necesidades de apoyo de los miembros adultos de la familia y ayudar a desarrollar estrategias para hacer frente a los obstáculos. Un ejemplo de ello es el programa de cinco pasos, para el cual está surgiendo una base empírica. El programa de los cinco pasos es una breve intervención psicosocial que se centra específicamente en los familiares de las personas que consumen drogas y los apoya por derecho propio como personas que se enfrentan a un problema difícil.
Algunas personas necesitarán un apoyo más intensivo y especializado, prestado a través de intervenciones como la terapia intensiva basada en la familia, la terapia de parejas conductuales, la terapia multidimensional familiar, el refuerzo de la comunidad y la formación familiar, así como enfoques basados en redes sociales.
En una reciente revisión bibliográfica (McGovern et al., 2021) en la que se investigaron los resultados sanitarios y sociales adversos derivados del consumo de sustancias por parte de un familiar cercano, se observó que las intervenciones conductuales podían ser eficaces para mejorar el bienestar social de los miembros de la familia (reducir la violencia en la pareja, reforzar la estabilidad familiar y aumentar la satisfacción en las relaciones) cuando se realizaban conjuntamente con la persona que consumía drogas. También se observó que los miembros de la familia pueden beneficiarse de un componente de intervención terapéutica individual. Se necesitan más investigaciones para desarrollar intervenciones psicosociales con múltiples componentes que aborden plenamente los daños complejos e intrincados que pueden sufrir las familias afectadas por el consumo de sustancias.
Las respuestas que abordan las necesidades de los niños afectados por el consumo de drogas por parte de los progenitores tienden a promover la resiliencia y a prestar apoyo en las diferentes fases de su desarrollo. Muchos de estos programas están dirigidos a jóvenes con vulnerabilidades más generales y no se centran específicamente en los niños afectados por el consumo de drogas de sus progenitores.
En general, los programas familiares se centran en mejorar las capacidades parentales y las interacciones entre progenitores e hijos, y pueden tener efectos positivos tanto en los progenitores como en los hijos, al mejorar las relaciones entre progenitores e hijos y los resultados en materia de desarrollo. Tales iniciativas pueden aplicarse en una amplia gama de fases de desarrollo, aunque variarán el contenido y el enfoque. Algunos programas, como Increible Years, el programa Parent Management Training Oregon y el programa Triple P, se han adaptado para su uso en diferentes grupos de edad.
Los programas escolares, como los grupos de apoyo basados en la escuela, y otros proyectos como Teen Club, una intervención de enfermería basada en la comunidad y diseñada para reducir los comportamientos de alto riesgo en niñas con progenitores que consumen sustancias, se centran principalmente en ayudar a los jóvenes a mejorar sus capacidades de adaptación y resiliencia (véase Centros escolares y drogas: respuestas sanitarias y sociales y Comunidades y drogas: respuestas sanitarias y sociales).
Las revisiones de las pruebas de la eficacia de las respuestas sugieren que las características clave de los programas eficaces incluyen:
- involucrar a los niños y a los progenitores, ofreciendo oportunidades para interacciones positivas entre progenitores e hijos;
- la inclusión de componentes de formación sobre capacidades familiares;
- garantizar el compromiso mediante el fomento de la confianza, la oferta de relaciones de apoyo entre iguales y la adquisición de conocimientos sobre las adicciones; y
- dar tiempo suficiente, preferiblemente más de diez semanas.
También se observó que los resultados cercanos a la intervención, como los conocimientos relacionados con el programa, las capacidades para afrontar problemas y las relaciones familiares, daban mejores resultados que los objetivos a más largo plazo conseguidos durante un periodo prolongado, como el desarrollo de la autoestima y la prevención de la iniciación al consumo de sustancias. Sin embargo, los datos sobre los resultados a más largo plazo son limitados.
Existen pruebas que sugieren que las intervenciones psicológicas y sociales para progenitores consumidores de sustancias, dependientes o no, también pueden ser beneficiosas para sus hijos, aunque se centren principalmente en abordar el consumo de drogas de los progenitores. Sin embargo, en casos de maltrato o abandono infantil extremos, es poco probable que los programas de prevención sean suficientes por sí mismos, y puede ser necesario que el sistema de protección del menor responda para proteger a determinados niños.
Perspectiva europea: disponibilidad de intervenciones relacionadas con las drogas para las familias
La mayor parte de la información sobre la disponibilidad de intervenciones en Europa para las familias de personas que consumen drogas se refiere a políticas e intervenciones que incluyen o se dirigen a los niños de las personas que consumen drogas. Se dispone de menos datos sobre las intervenciones dirigidas a los miembros adultos de la familia.
En 2013, la UE adoptó la Recomendación sobre la inversión en la infancia, en la que se reconocía la importancia de promover el bienestar de los niños, proteger los derechos del niño, luchar contra la exclusión social y la discriminación, y promover la justicia social y la protección de todos los niños. La Recomendación aboga por invertir en los niños para romper el ciclo de las desventajas y ha dado lugar a la creación de la Plataforma Europea para la Inversión en la Infancia (EPIC), que proporciona información sobre políticas y programas basados en datos contrastados que prestan apoyo a los niños y las familias que se enfrentan a una serie de retos y vulnerabilidades. Asimismo, incluye una plataforma para compartir las mejores políticas en favor de la infancia y la familia, y pretende fomentar la cooperación y el aprendizaje mutuo en este ámbito. La base de datos EMCDDA Xchange también ofrece ejemplos sobre programas de prevención evaluados positivamente que se han aplicado en Europa.
La importancia de apoyar a los niños afectados por el consumo de sustancias por parte de los progenitores también se reconoce en las estrategias sobre drogas de la mayoría de los países de la UE; sin embargo, se adoptan diferentes metodologías a nivel nacional. En Irlanda, se han desarrollado una serie de políticas gubernamentales, con acciones planificadas y supervisadas, en varios ministerios para abordar los retos a los que se enfrentan los hijos de progenitores que consumen drogas. En el marco de estas acciones, pueden introducirse programas de cuidado de los hijos basados en pruebas. En los Países Bajos, se han introducido una serie de programas de cuidado de los hijos basados en datos contrastados, dirigidos a comunidades y grupos vulnerables específicos.
Se han notificado intervenciones selectivas basadas en la familia disponibles en casi todos los países (véase el gráfico)
Gráfico. Disponibilidad de intervenciones basadas en la familia para niños afectados por el consumo de sustancias de los progenitores, 2019
Los datos de origen de este gráfico están disponibles en el cuadro de origen de esta página.
País | ISO code | Nivel de prestación |
---|---|---|
Austria | AT | Prestación limitada: existe en más de unas cuantas ubicaciones pertinentes (pero no en la mayoría de ellas) |
Bélgica | BE | Prestación limitada: existe en más de unas cuantas ubicaciones pertinentes (pero no en la mayoría de ellas) |
Bulgaria | BG | Prestación limitada: existe en más de unas cuantas ubicaciones pertinentes (pero no en la mayoría de ellas) |
Croacia | HR | Prestación limitada: existe en más de unas cuantas ubicaciones pertinentes (pero no en la mayoría de ellas) |
Chipre | CY | Prestación escasa: existe en unos pocos lugares pertinentes |
Chequia | CZ | Prestación escasa: existe en unos pocos lugares pertinentes |
Dinamarca | DK | Prestación extensa: existe en la mayoría de las ubicaciones pertinentes (pero no en prácticamente todas) |
Estonia | EE | No hay información disponible |
Finlandia | FI | Prestación limitada: existe en más de unas cuantas ubicaciones pertinentes (pero no en la mayoría de ellas) |
Francia | FR | Prestación limitada: existe en más de unas cuantas ubicaciones pertinentes (pero no en la mayoría de ellas) |
Alemania | DE | Prestación limitada: existe en más de unas cuantas ubicaciones pertinentes (pero no en la mayoría de ellas) |
Grecia | EL | Prestación limitada: existe en más de unas cuantas ubicaciones pertinentes (pero no en la mayoría de ellas) |
Irlanda | IE | Prestación extensa: existe en la mayoría de las ubicaciones pertinentes (pero no en prácticamente todas) |
Italia | IT | Prestación extensa: existe en la mayoría de las ubicaciones pertinentes (pero no en prácticamente todas) |
Letonia | LV | Prestación escasa: existe en unos pocos lugares pertinentes |
Lituania | LT | Prestación escasa: existe en unos pocos lugares pertinentes |
Luxemburgo | LU | Prestación extensa: existe en la mayoría de las ubicaciones pertinentes (pero no en prácticamente todas) |
Malta | MT | Prestación extensa: existe en la mayoría de las ubicaciones pertinentes (pero no en prácticamente todas) |
Países Bajos | NL | Prestación extensa: existe en la mayoría de las ubicaciones pertinentes (pero no en prácticamente todas) |
Noruega | NO | Prestación extensa: existe en la mayoría de las ubicaciones pertinentes (pero no en prácticamente todas) |
Polonia | PL | Prestación extensa: existe en la mayoría de las ubicaciones pertinentes (pero no en prácticamente todas) |
Portugal | PT | Prestación extensa: existe en la mayoría de las ubicaciones pertinentes (pero no en prácticamente todas) |
Rumanía | RO | Prestación limitada: existe en más de unas cuantas ubicaciones pertinentes (pero no en la mayoría de ellas) |
Eslovaquia | SK | Prestación limitada: existe en más de unas cuantas ubicaciones pertinentes (pero no en la mayoría de ellas) |
Eslovenia | SI | Prestación completa: existe en casi todos los lugares pertinentes |
España | ES | Prestación limitada: existe en más de unas cuantas ubicaciones pertinentes (pero no en la mayoría de ellas) |
Suecia | SE | Prestación extensa: existe en la mayoría de las ubicaciones pertinentes (pero no en prácticamente todas) |
Aunque se dispone de poca información sobre la disponibilidad general de programas de apoyo a los familiares adultos de personas con problemas de drogas en Europa, se han documentado una serie de programas. En Irlanda, por ejemplo, la antigua National Family Support Network (Red Nacional de Apoyo a la Familia), una organización dirigida por pares, proporcionó respaldo a las redes de apoyo entre iguales de todo el país y abogó por la mejora de las políticas y las prácticas. Además, el problema de la deuda por drogas y la intimidación está reconocido en la Irish National Drug Strategy (Estrategia nacional sobre drogas de Irlanda) y en un Drug Related Intimidation Programme (Programa de intimidación relacionada con las drogas) establecido por la policía en colaboración con la antigua Red Nacional de Apoyo a la Familia. En otros países europeos existen organizaciones nacionales similares de apoyo y defensa de la familia dirigidas por pares. El apoyo en el duelo suele ser un componente importante del trabajo de estas organizaciones, que también pueden participar en campañas o promover programas de distribución de naloxona.
Implicaciones para las prácticas y las políticas
Elementos básicos
- Los familiares de las personas que consumen drogas pueden experimentar una amplia gama de daños y pueden necesitar servicios de apoyo que les ayuden a abordarlos. Las respuestas adecuadas pueden incluir la prestación de asistencia sanitaria primaria para aliviar la ansiedad y el estrés que experimentan, el apoyo entre iguales, la asistencia en caso de duelo y el apoyo a los cuidadores familiares.
- Los niños afectados por el consumo de sustancias por parte de los progenitores corren un mayor riesgo de sufrir una serie de daños, por lo que se necesitan programas que les proporcionen apoyo y fomenten su resiliencia en las distintas fases de desarrollo. Entre ellas se incluyen programas e iniciativas de cuidado de los hijos basados en la familia que ayudan directamente a los propios niños.
- Las necesidades de los miembros de la familia y su posible contribución a la eficacia del tratamiento de la drogodependencia deben reconocerse en las directrices sobre políticas y prácticas en materia de drogas.
Oportunidades
- La participación de los familiares adultos de personas con problemas relacionados con las drogas en el desarrollo de políticas y prácticas, así como el apoyo facilitado por pares pueden mejorar la prestación de servicios en general y, específicamente, para los familiares.
Déficit
- La información sobre la escala, el alcance y la naturaleza de las intervenciones disponibles para los miembros de la familia es limitada, y es necesario mejorar la investigación y el seguimiento en este ámbito.
Otros recursos
EMCDDA
- Registro de prevención Xchange.
- Portal de buenas prácticas: base de datos de pruebas.
- Responses to the needs of children of people who use drugs, 2022.
- Multidimensional family therapy for adolescent drug users: a systematic review, 2014.
- Pregnancy, childcare and the family: key issues for Europe’s response to drugs, Selected issue, 2012.
Otras fuentes
- Plataforma Europea para la Inversión en la Infancia (EPIC).
- McGovern, R., Smart, D., Alderson, H., Araújo-Soares, V., Brown, J., Buykx, P., Evans, V., Fleming, K., Hickman, M., Macleod, J., Meier, P. y Kaner, E. (2021), «Psychosocial interventions to improve psychological, social and physical wellbeing in family members affected by an adult relative’s substance use: a systematic search and review of the evidence», International Journal of Environmental Research and Public Health 18(4), p. 1793. doi:10.3390/ijerph18041793.
Referencias bibliográficas
- Advisory Council on the Misuse of Drugs (ACMD) (2003), Hidden harm: responding to the needs of children of problem drug users, ACMD.
- Cleaver, H. Unell, I. y Aldgate J. (2011), Children’s needs – parenting capacity. Child abuse: parental mental disease, learning disability, substance abuse, and domestic violence, 2ª edición, The Stationery Office, Londres.
- McGovern, R., Gilvarry, E., Addison, M., Alderson, M., Carr, L., Geijer-Simpson, E., Hrisos, N., Lingam, R., Minos, D., Smart, D. y Kaner, E. (2018), Addressing the impact of non-dependent parental substance misuse upon children. A rapid review of the evidence of prevalence, impact and effective interventions, Public Health England, Londres
- Peleg-Oren, N. y Teichman, M. (2006), «Young children of parents with substance use disorders (SUD): a review of the literature and implications for social work practice», Journal of Social Work Practice in the Addictions 6(1-2), pp. 49-61.
Acerca de esta miniguía
Esta miniguía ofrece una visión general de lo que se debe tener en cuenta a la hora de planificar o proporcionar respuestas sanitarias y sociales a las familias de consumidores de drogas, y examina las intervenciones disponibles y su eficacia. También tiene en cuenta las implicaciones para las prácticas y las políticas. Esta miniguía forma parte de un conjunto más amplio que, combinado, constituye las Respuestas sanitarias y sociales a los problemas relacionados con las drogas: una guía europea.
Citación recomendada: Observatorio Europeo de las Drogas y las Toxicomanías (2022), Familias de consumidores de drogas: respuestas sanitarias y sociales, https://www.emcdda.europa.eu/publications/mini-guides/families-health-a….